jueves

perdida

retazos
de un perchero vacío
y una camisa arrugada
pensar
en el viento intrínseco
de tu cuerpo inundado

junté tus manos rotas
y cerré mi boca
para no llorar

puedo oír
el crujir de tu
fuente de placer
rompiéndose
puedo ver
el ruido de las sirenas
agónicas


me siento
frente a las gradas
de la iglesia
reclamando
una excusa

estoy sola
mi hombre se ha ido

retazos
de una camisa
que ya no existe
veo a tu padre llorar
frente a los armarios vacíos

retazos
de una mujer
que ya no existe
sepultada
en la infancia
nula
carente

la figura
este cuerpo
que no me pertenece
es usado y atado



No hay comentarios:

Publicar un comentario