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a veces
me enamoro un poco
de mí misma

un poquito


no pasa siempre

pero cuando me pasa
de que forma me pasa
que tan atravesada me vuelvo

y después
incoherente lastimosa de energía
me vuelvo nítida perfecta espástica
andróginamente femenina

SUPERFLUA de emoción

me vuelvo
angelicalmente pervertida
rebosante de pétalos negros
y roja
la boca
y la sangre también
roja y vibrante
y caliente

me muevo
como un gato lunar
destrozando
encuentros
impactando
cual semáforo rojo

lo rompo todo
lo grito
todo
lo beso todo
lo todo todo

me creo
ferviente nena
de un calefón helado